Tanto Jose Joaquín como Manuel, explicaron a los asistentes, que la acogida está dirigida a aquellas personas que vienen a la Eucaristía y no pertenecen a ningún grupo. Entre dichas actividades se encuentra la de captación, que se realiza a través de la invitación personal. De esta forma ya se han incorporado nuevas personas a ciertos grupos de la parroquia (grupos de lectura, responsable de la acogida...)
La
actitud de los colaboradores es fomentar en nuestras parroquia y comunidad,
momentos y espacios donde participar de los valores humanos de los demás. Con
este impulso se detalló la promoción renovador que se anda buscando desde el
Proyecto Diocesano, situando a toda la comunidad en “modo de Acogida”.
Los responsables del taller, indicaron que generalmente tras celebrar la Eucaristía se prepara un acto en la calle, invitando a los fieles a unirse al grupo donde se sigue la pedagogía de Dios que es el acogimiento y misericordia.
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